TUMBAN DE LA API A ‘CUATE’ DE EGIDIO
Una carpeta con un ‘negro’ expediente fue enviado desde las oficinas de la presidencia de la república y entregado el jueves pasado al secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú.
El expediente describía todo lo que se tenía que saber de Vicente Saint Martín Ochoa, designado apenas un día antes como nuevo director de la Administración Portuaria Integral (API) de Altamira.
La compra de una casa valuada en más de 6 millones de pesos en Brownsville, Texas; los millones de pesos destinados al pago de servicios y que no fueron devueltos a los rubros etiquetados originalmente en el presupuesto; y la serie de observaciones hechas por la Auditoría Superior de la Federación durante su gestión en el puerto de Matamoros. Estaba eso… y más.
Tras leer el expediente, Javier Jiménez Espriú hizo lo que tenía que hacer: ordenar al coordinador de Puertos y Marina Mercante, Héctor López Gutiérrez, la salida o destitución del recién designado director de la API de Altamira. De la noche a la mañana, lo tumbaron.
El escándalo estalló en las redes gubernamentales lopezobradoristas y en ciertos sectores de la sociedad apenas se anunció la designación de Vicente Saint Martín Ochoa como nuevo responsable de la API altamirense.
La pregunta era elemental: ¿Cómo era posible que la Cuarta Transformación otorgara la administración de uno de los puertos más importantes y estratégicos para el desarrollo económico del país a un personaje muy cercano al ex gobernador de Tamaulipas, Egidio Torre Cantú?
El problema con Vicente Saint Martín Ochoa no sólo era su amistad con el mandatario estatal y con el ex secretario de Obras Públicas del sexenio anterior, Manuel Rodríguez Morales, sino las múltiples irregularidades señaladas en su momento por la Auditoría Superior de la Federación.
Esas anomalías se registraron durante su gestión como director general de la Administración Portuaria Integral de Tamaulipas S. A. de C.V., cargo que ocupó a partir de 2014 tras dejar la subsecretaría de Planeación y Proyectos Estratégicos de la Secretaría de Obras Públicas del gobierno egidista.
Entre las irregularidades que detectó la Auditoría Superior de la Federación en la API tamaulipeca se encontró un subejercicio de casi 4 millones de pesos, recursos que fueron canalizados al rubro de servicios personales.
El pago de servicios con recursos destinados a otras áreas fue algo común en la gestión del funcionario. En particular, el órgano fiscalizador descubrió 18 transferencias bancarias para el pago de servicios. En 7 de esos casos no se devolvió el dinero. El monto que quedó pendiente por regresar fue de 2 millones 887 mil pesos.
La falta de comprobación documental fue otra de las anomalías registradas. Esos movimientos ascendieron a 4 millones 821 mil pesos. El caso era investigado, pero, como suele suceder, no pasó nada.
Bueno, sí pasó algo: Vicente Saint Martín Ochoa fue nombrado director general de la API de Altamira gracias a las relaciones sostenidas por sus dos grandes cuates, el ex gobernador Egidio Torre Cantú, y el ex secretario de Obras Públicas del sexenio pasado, Manuel Rodríguez, con funcionarios de la SCT de la 4T.
No obstante, la designación se cayó 24 horas después, una vez que estalló el escándalo al interior del gobierno de la Cuarta Transformación.
Arquitecto de profesión, Vicente Saint Martín Ochoa tiene una hija que es conductora de televisión. Su nombre: Alma Saint Martín. Sumamente atractiva, algún tiempo fue la titular de la sección de espectáculos del noticiero matutino de Carlos Loret de Mola. Ahora es conductora en un espacio noticioso de El Heraldo TV.
Bien se sabe… que una de las debilidades del sexenio pasado tamaulipeco fueron las conductoras de televisión. Punto final.
LA CANDENTE PASARELA MORENISTA…
Lo que debería ser el desayuno de la unidad de Morena en Tampico, el evento que se realizará hoy en el Salón Los Faroles se puede poner candente. De entrada, el grupo de ‘Los Históricos’ se siente, una vez más, fuera de la jugada. No los han incluido en las listas.
Entre las damas fundadoras de Morena en tierras jaibas que tienen su legítima aspiración se encuentran la maestra Noemí Magaña y la abogada Maritza Hernández.
Además, el regidor Hugo Peñaloza envió una invitación para el desayuno por whatsapp a los militantes del partido lopezobradorista… ¡¡¡con una foto suya!!! Es decir, el edil ya se anotó como aspirante a la candidatura a la diputación local por el Distrito 21.
Por su parte, la senadora Lupita Covarrubias Cervantes ya exigió que se imponga un veto a los priistas que buscan obtener las candidaturas del Movimiento de Regeneración Nacional.
Entre ‘Los Morenos’ tampoco gusta el hecho de que un ex alcalde priista de Tampico recomienda aspirantes en el partido de la 4T y a la vez promueva a su sobrina (de apellidos González Azcárraga) en el PAN. Algo huele muy raro.
¿Acaso la elección por las diputaciones locales porteñas está más arreglada que una lucha de la ‘Triple A’?…
Y PARA CERRAR…
Otro que se puede caer de la API es Ricardo Correa Chairez. Tras ser puesto en la API de Tampico, lo quieren enviar a la API de Altamira. Sin embargo, en ciertas esferas de la Cuarta Transformación saben que les quieren meter un gol de media cancha con color azul. El lunes se podría resolver el tema.
